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“ESMACA no es sólo un lugar al que ir a estudiar, es su gente y el ambiente que generamos entre todos”
- 28 octubre, 2014
- Creado por: esmaca
- Categoría: Testimonios

Continuamos con los testimonios de nuestros alumnos. Hoy le toca el turno a Ágata García, alumna del curso intensivo de macrobiótica de Nivel 1. Aunque es española, Ágata vivía en Costa Rica y buscaba desde hacía tiempo clases de cocina que no chocaran con su alimentación vegana. Así fue como dio con ESMACA.
“Cuando tomé la decisión de estudiar macrobiótica no sabía que este primer nivel intensivo en Esmaca iba a cambiar tanto mi vida. Mi objetivo principal era lograr de alguna manera hacer un enlace entre psicología, mi profesión, y cocina, mi pasión. Pero luego de 4 años de vegetarianismo y dos de veganismo se me hacía imposible aprender técnicas de cocina en una escuela que manipulara alimentos de origen animal. Tenía pocas opciones para estudiar cocina y en mi búsqueda encontré Esmaca, así que matriculé principalmente porque se trataba de clases de cocina vegana con un enfoque saludable.
Cuando inicié el Nivel 1 no tenía muy clara que era la macrobiótica, en qué consistía y qué tan grande podía a ser su efecto sobre el cuerpo… fue empezar el curso y redescubrir la cocina desde una mirada filosófica, con una aplicación práctica y de resultados sanadores. Una de las cosas que valoro más del curso fue la oportunidad de poder experimentar la macrobiótica en mi día a día, más allá de las explicaciones teóricas podía reconocer en mi cuerpo el efecto de los alimentos que estaba ingiriendo y comparar lo que estaba viviendo con las experiencias de mis compañeros. Sin saberlo, había abierto la puerta no sólo a un complemento ideal para entender la salud mental desde un enfoque holístico e integrador, sino que estaba abriendo la puerta a un mayor conocimiento de mi cuerpo y mis emociones del cual antes no era consciente. Cosas que antes asumía como parte de mí, como el tener bajonazos de presión o fatiga, pude entender que se trataban de hábitos que seguía manteniendo y que estaban afectando a mi cuerpo… la sensación de reconocer “yo no soy así es sólo que ¡ESTOY así!” es maravillosa, porque nos da la posibilidad de cambio.
En cuanto al ambiente en clase, me sentí muy a gusto y feliz de poder compartir con personas de tan distintos y distantes lugares geográficos pero vecinos de inquietudes e intereses. Cada persona en el curso me enseñó muchísimo y disfruté y disfruto su compañía hasta hoy, porque realmente en este curso hice amigos para la vida y les recuerdo constantemente.
Por otro lado fue muy bonito llevar las clases, cada profesor desde su experiencia y su trayectoria logró trasmitir de manera clara los conceptos hasta ahora nuevos para nosotros; no solamente son excelentes profesores sino de una calidez humana y una vibra que da gusto ir a clases. Igualmente Amelia, la chef de la escuela, una persona bellísima y con un talento impresionante para la cocina que nunca dejó de sorprendernos; y Blanca, encargada de la parte más administrativa, siempre recibiéndonos con una sonrisa de oreja a oreja.
Esmaca para mí no es sólo un lugar físico al cual fui a estudiar, es su gente y el ambiente que entre todos generamos; y sobre todo significa una herramienta más para hacerme responsable de mi salud y calidad de vida. Superó mis expectativas y me quedo muy satisfecha de haber tomado la decisión de venir a desde Costa Rica a hacer este primer intensivo.
La experiencia fue tan buena que voy a llevar el Intensivo Nivel 2 con muchos de mis compañeros del Nivel 1. Este primer curso definitivamente nos dejó con ganas de más y es la oportunidad perfecta para reencontrarnos y ver todo lo que hemos integrado a nuestros hábitos durante estos meses. La invitación a la escuela está abierta y de mi parte más que recomendada.”