Vivimos un momento en la alimentación, da igual que sea más natural o no que todo tiene que ser super elaborado, las presentaciones deben ser mega curradas, ya casi nadie se conforma con un bizcocho como postre, tiene que ser un brownie vegano con su cacao y su aceite de coco….

Y yo me pregunto, así es mejor?? Recuerdo a mi abuela comiendo hervido valenciano, que es el plato más sencillo del mundo: patata ( yo la eliminé porque nunca me sentó bien), judía verde “bajoqueta”, cebolla, zanahoria,….y poco más, un chorrito de aceite y para adentro. Nunca escuché que le faltase presentación, ni llevaba salsas de mil sabores. Mi abuela murió casi a los 100 años y fue porque ya era mayor, no tuvo ningún problema de salud determinante.

Está claro que la comida siempre entra primero por los ojos y cuanto más elaborada más disfrutamos de ella. Pero creo que se ha llegado a un punto en el que creo que se debe volver al “menos es más”, simplificar al máximo y disfrutar!! A veces leo recetas tan complicadas con unos ingredientes que no tengo en casa que con el poco tiempo que me queda para preparar la comida del día no me apetece meterme en esos berenjenales.

Por eso creo en una presentación cuidada y una materia prima sencilla y no demasiado elaborada. Para mí es lo ideal, da igual que coma en mi casa, vaya donde unos amigos o me meta en un restaurante. Y os aseguro que el hervido valenciano es algo presente en casa un día sí y otro también, la que tenga tiempo en casa de currarse otra cosa la felicito, yo disfruto de un buen arroz integral acabado de hacer, unas verduras hervidas y una crema de legumbres. Si simplificas tu dieta también simplificas tu vida y mejora no sólo tu salud física, sino también tu salud mental y emocional.

Georges Ohsawa comentaba en una de las siete condiciones de salud BUEN APETITO “Quien no pueda tomar cualquier alimento natural con placer y con el mayor agradecimiento hacia el creador es porque le falta apetito. Si encuentra muy apetitoso un simple pedazo de pan integral o arroz integral es porque tiene un buen apetito y un buen estómago”

Y para volver a lo básico te ofrezco dos cosas: la primera es una serie de recetas sencillas pero muy efectivas:

Sopa de miso auténtica

Estofado dulce de garbanzos

Hamburguesas de mijo

Salteado largo de verduras con tofu y algas

La otra es algo fantástico que he creado. En ESMACA vamos a lanzar una serie de 3 talleres de macrobiótica básica, esencial, donde aprenderás lo más importante para empezar a trabajar con esta forma de comer y de entender la vida que estoy seguro de que te apasionará. Y si ya practicas macrobiótica lo puedes recomendar a algún familiar o amig@, cuando lo haga te lo agradecerá. Aquí tienes más información.